Parece que no todo el mundo ha entendido las palabras de la Presidenta, Mati Cuenca, en Balón Parado con Juan Carlos Mena, así que intentaré explicar lo que interpreto. Empecemos por lo básico… En un club como el CB Almansa, para contestar a la gran pregunta, hay que tener en cuenta dos factores: el deportivo y el económico.
En cuanto al deportivo, están trabajando en ello. A falta de 9 jornadas, el CB Almansa suma 2 victorias más que los 3 últimos clasificados. Eso no significa nada porque ya sabemos lo durísima que es esta categoría. La situación podría ser mejor si hubiéramos ganado en Melilla, pero no hicimos un buen partido y merecimos la derrota. No hay excusas. Eso sí, mal haríamos en creernos más de lo que somos, y no hablo del equipo. Melilla tiene muchos más recursos que nosotros a todos los niveles, acaban de hacer un fichaje diferencial (¿os acordáis de lo letal que fue Darko Balaban el día de nuestro debut en LEB Oro ante Ourense aquel 28 de septiembre de 2019 en el Pabellón?) y lo más importante: es el decano de la categoría. Decano según la RAE: que es el miembro más antiguo de una colectividad. En efecto, Melilla ha jugado TODAS las temporadas desde que se creó la competición en 1996. ¡Melilla lleva 27 años jugando LEB Oro! ¿Pensáis que es por casualidad?
Desde que aterrizamos en la categoría hace 4 temporadas nuestro destino es luchar, sufrir y perder más que ganar, sobre todo en una temporada en la que hemos bajado en 98.100 euros el presupuesto respecto a la temporada anterior. El presupuesto de la temporada 2021/22 ascendía a 533.000 euros y el de la 2022/23, exactamente, es de 434.900 euros. No es opinable, son datos. El contexto es una Liga en la que la mayoría de equipos han subido su presupuesto ¡un 20%! Solo San Pablo Burgos cuenta con 3 millones de euros, cuando nosotros no llegamos ni a medio millón, pero hablemos de equipos ‘mortales’… Se acaba de publicar la aportación de Fernando Roig a TAU Castelló: 350.000 euros anuales, es decir, ¡casi nuestro presupuesto! Y pese a las diferencias económicas, el CB Almansa está compitiendo porque Joaquín Rodríguez y Tino Ugidos son muy buenos en lo suyo y han convencido y reclutado a una serie de jugadores a los que, en unos años, recordaremos con orgullo por haber vestido nuestra camiseta. Al tiempo.
Tengo la sensación de que no hace tanto, el público era consciente de estas dificultades y las utilizaba como fortaleza: el orgullo que significa pertenecer a un club como el CBA. Sé que no es generalizado, pero están empezando a suceder cosas preocupantes, como los insultos y menosprecios a nuestros jugadores, a nuestro cuerpo técnico o a nuestra Directiva. Ver para creer. Y no hablo solo de las redes sociales porque tengo claro que ahí sólo se hace notar una minoría ruidosa. En el mismo Pabellón, el día de Lleida, esos insultos se escucharon en la pista y duelen, claro que duelen. Los destinatarios sienten y sufren. Se puede expresar el malestar de muchas formas, pero hay barreras que no se deberían traspasar, no en este club. Me parece igual de lamentable lo que ocurre con los equipos de fútbol de élite, pero aquí no hay millonarios, que a nadie se le olvide.
Estos profesionales están aquí para dar lo mejor que tienen, salgan o no las cosas. Si alguien piensa que uno se puede hacer rico en el CB Almansa se equivoca, por dinero nadie viene a este club. Para llegar al CBA hay que tener muy claro cuál es nuestra realidad y el primero que la asume es Tino Ugidos, uno de los tipos más honestos que he conocido. Lo único que quiere es el bien del CB Almansa, por encima del suyo propio, como me ha demostrado. No lo he escuchado quejarse por todos los infortunios que hemos sufrido esta temporada (haced memoria porque el mérito de seguir en pie es descomunal) y tampoco lo he escuchado sacar pecho por la histórica gesta de ganar a Estudiantes en el Wizink ante casi 10.500 personas.
Me pregunto qué ha ocurrido de la temporada pasada a esta para que pasáramos de un gran desembarco de almanseños en Madrid a poder contar con los dedos de las manos a los desplazados. ¿Pasó la novedad, nos cansamos enseguida de todo, incluso del CB Almansa? Cuando jugamos en La Bombonera tengo claro que no es así, porque veo a la gente ilusionada, con muchas ganas de ganar, pero sigo dándole vueltas…
Ahora bien, si le vamos a exigir más al club justo en la temporada en la que menos recursos tiene y más desgracias está sufriendo, ya no entiendo nada. Se lesionó tras sólo 10 partidos nuestro mejor jugador, un Robinson que estaba marcando diferencias en la Liga, Bobby Harris dio la gran espantada cuando peor lo estábamos pasando…
Pese a todo, estamos en pie y en una situación privilegiada, pero parece que lo negativo pesa más que lo positivo. La Junta Directiva sigue trabajando en la sombra, recibiendo acusaciones que ni son ciertas ni merecen. Aunque no estén pasando una temporada agradable, deben ir con la cabeza bien alta por llevar a cabo la mejor y más difícil gestión de la historia del baloncesto de Castilla-La Mancha. Os recuerdo que ningún equipo de toda la comunidad aguantó más de un curso en LEB Oro y nosotros ya vamos por el cuarto. Eternamente agradecido al trabajo sin descanso y sin recompensa de todos ellos: Mati Cuenca, Salvador Albertos, Jonatan Tomás, Ana Matea, Eva Cuenca, José Alberola, Antonio Piqueras, Amparo Sanz y todos los que les prestan las manos que a ellos les faltan.
Ellos sí trabajan gratis para que el club esté donde está. Los jugadores cobran, eso faltaba, es su profesión, pero son conscientes del club al que representan. Ganar a Estudiantes como lo hicieron tiene el doble de mérito. ¿Sabéis que para ahorrar al club una noche de hotel y tres comidas (cena, desayuno y almuerzo) aceptaron viajar el mismo día del partido? Fueron directos del bus a la pista. No son superhéroes por ello, pero decidme otro equipo que haya hecho un desplazamiento de esta distancia en el día en LEB Oro. Dudo que lo encontréis.
El CBA es lo primero y lo pusieron por delante en esa y en otras muchas circunstancias que no trascienden porque… La económica es la otra parte de la ecuación que se tiene que dar para que podamos jugar en LEB Oro. Todavía no ha aparecido el patrocinador principal con el que soñábamos. Es una oportunidad perdida para una empresa almanseña que podría pasar a la historia ligando su marca y sus valores a las gestas del CB Almansa, un club que representa a la ciudad, a la provincia y a la región allá por donde va. Por cierto, ¿cuánto vale la publicidad que genera el club para Almansa, para Albacete y para Castilla-La Mancha? ¿Cuánto valen las 2 horas de televisión nacional (Movistar) del partido ante el Estu? ¿Y la fotografía de Marc Gasol, de Serge Gnabry o de Juan Carlos Ferrero en La Bombonera? Seguramente vale mucho más que las subvenciones que recibe el club de todos los estamentos.
Ahora que estamos cerca de nuevas elecciones, me gustaría escuchar los proyectos de los partidos políticos para el deporte. El deporte no es un gasto, siempre es una inversión. Cuanto más invierte un Gobierno en deporte menos tiene que gastar en hospitales. Invertir en deporte es hacerlo en salud, en educación y en valores. Que pregunten a los padres y madres de los 257 niños y niñas que se están formando como seres humanos en la cantera.
Sin un patrocinador principal, el club sigue a flote en la categoría porque hay un buen puñado de empresas que arriman el hombro. Sin ellos no estaríamos aquí. Y tampoco sin José Cristóbal Callado. Espero que me perdone porque prefiere trabajar con discreción, pero no es momento de callarse nada. Sin él poniendo su dinero y sus contactos al servicio del club, este sueño habría sido precisamente eso, un sueño. Eternamente agradecido por su implicación absoluta con el proyecto.
Explicado el contexto en el que habló Mati, la ciudad de Almansa también debe responder a la pregunta. ¿Puede seguir el CB Almansa en LEB Oro si primero se lo gana en la pista? Mati puso palabras a algo a lo que yo llevaba tiempo dando vueltas. Pese a que alguno no lo crea, los abonos son una pata fundamental en la que se sustenta un proyecto de este calibre. Cuando el club bajó de precio los abonos para esta temporada haciendo un esfuerzo y tratando de llenar de nuevo La Bombonera, lo hizo pensando que la afición respondería de otra manera. El precio es el mínimo al que se puede ofrecer este espectáculo. Tener la posibilidad, a 5 minutos de tu casa, de ver a equipos como Estudiantes, Andorra, San Pablo Burgos, Palencia o Valladolid por unos 10 euros (o menos) el partido no es en absoluto caro y nadie me va a convencer de lo contrario. ¿Cuánto te costaría desplazarte, por ejemplo, a Valencia para ver un partido? ¿Gasolina, cena y entrada serían más de 10 euros, verdad? Y en Valencia podrías disfrutar de un partidazo, pero dudo que se te mueva algo por dentro, porque la camiseta azul nos representa a todos.
Sigo con más datos para hablar con propiedad. Podrás estar de acuerdo conmigo o no, pero pongo los datos encima de la mesa y que cada uno saque sus conclusiones. La temporada 2018/19 jugamos en LEB Plata y logramos el ascenso con unos 600 abonados. La siguiente temporada, la primera en LEB Oro, el precio de los abonos obviamente subió, pero el número de abonados fue muy similar. Después vinieron dos temporadas marcadas, primero por la pandemia, y después por el miedo al contagio, al contacto social, por la restricción de aforos… Podemos decir que esta es la primera temporada de normalidad. Insisto, el club bajó los precios (150 euros grada y 130 barandilla) para volver a llenar el Pabellón, pero el resultado no fue esperanzador: apenas se llegó a 450 abonados. Por el camino se quedaron 150 abonos. Cada uno es libre de elegir en qué gasta su dinero, faltaría más, pero si queremos saber por qué dice Mati lo que dice, hay que analizar la situación.
Pensar en 1000 abonados y llenar el Pabellón es una utopía, pero ¿de verdad una población de 25.000 habitantes como Almansa no puede aspirar a tener al menos 300 abonados más? Fijaos, solo 300 abonados, a 150 euros el abono, significarían 45.000 euros. En la primera temporada en LEB Oro la afición demostró que quería a toda costa jugar en esta categoría y aportó unos 290.000 euros al presupuesto, una auténtica pasada. Por cierto, soy periodista y me informo para escribir, pero cualquier aficionado tiene acceso a esta información asistiendo a las Juntas del club. El único requisito es pagar la cuota de socio: 50 euros al año que incluyen, por ejemplo, entradas gratis para los días del club. Pero más allá de los 50 euros, ser socio significa comprometerse con el club. ¿Sabéis cuántos socios tiene el CB Almansa en la mejor época deportiva de su historia? Solo 70.
Así que, claro que los aficionados tenemos que decidir si queremos que el CB Almansa siga en LEB Oro. Esperar a sacar el abono con la temporada empezada porque, a priori, me gusta el equipo que se ha hecho, en un club como el nuestro no tiene sentido. Aunque pedir fichajes a mitad de temporada, viendo los partidos por la tele, tiene todavía menos sentido. Por cierto, ver el baloncesto en televisión está muy bien, pero no garantiza la continuidad de la LEB Oro en Almansa.
¿Con qué dinero se pagan esos fichajes que se reclaman? Con los abonos de mitad de temporada ya os digo que no. Y aún así, Tino Ugidos ha traído a un escolta de la talla de Petar Aranitovic. Echadle un vistazo a su curículum. Petar no está aquí por dinero, de hecho rechazó dos ofertas de LEB Oro. Preguntadle qué hace aquí y os dirá que ha venido porque Tino lo necesita. Trabajo. En silencio. Siempre.
Entiendo la frustración de la gente cuando se pierde, pero no entendería que dejáramos solo al club cuando más nos necesita. Estamos sufriendo mucho, a mí me duele, ¿eh? Pero me pongo en la piel del aficionado de Estudiantes y me parece admirable lo que hacen. Bajar a LEB Oro, no lograr el ascenso y meter a 10.500 personas en el Palacio para ver al CB Almansa, con la de opciones de ocio que hay un domingo en Madrid. Es la leche, eso sólo es propio de una afición con mayúsculas con la que, precisamente, nos hemos hermanado por vivir el baloncesto de forma similar, a pesar de todas las diferencias que separan a nuestros clubes.
Pues eso, que también nos toca elegir cómo queremos acabar la temporada: nos podemos autodestruir o podemos hacernos fuertes entre todos. ¿Que se han cometido errores? ¡Por supuesto! Y se asumen y se trabaja para que no vuelvan a ocurrir, pero como esto es deporte, pueden volver a ocurrir. Y, por supuestísimo que se acepta la crítica, la constructiva no es que sea necesaria, es que es vital para crecer, pero el respeto jamás puede faltar. El lema #JuntosSomosMásFuertes es tan real que: o somos JUNTOS o no somos. Este milagro, para no evaporarse, necesita de su Marea Azul, pero de su Marea comprometida. La grada, en Almansa, no forma parte del decorado. Si por algo nos hemos labrado una imagen en la LEB Oro es porque hemos hecho de La Bombonera una caldera y una fortaleza, pase lo que pase. Si nos dejamos las gargantas en estas 9 finales por Sergi, Mateo, Carles, Petar, Lazar, Mads, Jaime, Edu, Javi, Marvin y LaRon, estoy convencido de que nos lo van a devolver con creces. Tened por seguro que Tino, Sama, Julio, Marcos, Juan y Álex van a dejarse el alma por sacar lo mejor de ellos, pero la Marea Azul también puede ser decisiva, no tengo pruebas, pero tampoco dudas. ¿Cuántas veces nos ha levantado, cuántas veces ha creído en imposibles, cuántas veces ha metido triples? Sin ella, el CB Almansa no tendría razón de ser.
Para acabar, dos deseos: el primero es que nos dejemos, TODOS, JUNTOS, la piel para volver a hacer de La Bombonera una olla a presión (aquí la Peña Sin Límite, como siempre, es fundamental) y para tratar de lograr una cuarta permanencia que tendría, incluso, más valor que las anteriores por todo lo que estamos sufriendo. El segundo deseo es que la afición dijera sí a la continuidad del proyecto del CB Almansa, en LEB Oro o en LEB Plata, pero que no perdiéramos la ilusión que nos ha traído hasta aquí: la salsa del mercado de fichajes, el ambiente de las previas, la emoción de los partidos y las cenas de después, ya sean para desahogarnos por un mal partido o para celebrar un triunfo épico. Tanto esfuerzo invertido por tantísima gente en estos años no puede evaporarse, no podemos permitirlo. Aquí va un capítulo importante de la historia deportiva de Almansa y nosotros tenemos la suerte de ser testigos directos. Esta época tiene que ser recordada por: “Aquella Marea Azul que hacía REVENTAR LA BOMBONERA cada fin de semana”.
